Es una realidad que la edad media a la que las mujeres españolas son madres ha ido en aumento desde hace años. Si en 1980 la edad media era de 28,2 años, en 2014 es de 32,2 y de 2000 a 2012 se duplicó el número de mujeres embarazadas de más de 40 años.
La causa de estas maternidades tardías son varias: físicas, psicosociales, laborales, económicas, etc. que explican el hecho que cada vez más se acuda a clínicas de fertilidad para lograr un embarazo. En torno al 3,2% de bebés nacidos en España lo fueron a través de técnicas de reproducción asistida.
Las maternidades tardías vienen acompañadas de un descenso de la fecundidad. La edad es uno de los factores determinantes en la mayor o menor probabilidad de conseguir un embarazo por vía natural. Así, en torno a los 35 años se produce un descenso importante en la capacidad reproductora de la mujer, que se hace muy notable en edades por encima de los 40 años. La probabilidad de embarazo natural en mujeres de más de 43 años es inferior al 5%.
¿Cuál es el límite de edad recomendable para ser madre?
En España, la ley no fija ningún límite de edad pero el acceso a tratamientos de reproducción asistida por el Sistema Público de Salud es de 40 años. Lo que empuja a muchas parejas a recurrir a tratamientos de fertilidad en clínicas privadas.
En el sector privado, y aunque la ley española no determina ningún límite de edad, la comunidad médica coindice en realizar ningún tratamiento a mujeres por encima de los 50 años. Esta es la norma de comportamiento adoptada por las clínicas de reproducción asistida en España.
Los motivos para este límite es que no es recomendable ni ética ni médicamente. Los especialistas en España consideran que por encima de los 50 años el organismo de la mujer no esta diseñado para un embarazo, edades tan tardías aumentan enormemente las complicaciones derivadas del mismo, incrementándose no solo el riesgo para la madre sino también existe riesgo para los bebés.
Esta perfectamente documentado que en edades superiores a 45 años, quedarse embarazada aumenta el riesgo de patologías en la madre como la hipertensión y la diabetes, lo que influye negativamente en el desarrollo cognitivo y mental del bebé, provocando en muchos casos partos prematuros.
El caso de la mujer de 64 años, que ha sido madre de 2 bebés por reproducción asistida, a agitado de nuevo el debate. En este caso la mujer logró acceder al tratamiento de fertilidad en una clínica en EEUU, lo que supone una temeridad médica ya que introducir dos embriones en una mujer de edad tan avanzada, duplica los riesgos antes mencionados.
Muchos facultativos consideran una aberración y una insensatez médica los casos de mujeres de más de 60 años que logran ser madres, por los riesgos de salud que conlleva tanto para la madre como para el futuro bebé.