Los tratamientos de fertilidad son cada vez más frecuentes por el retraso de la maternidad. Aun así, iniciar un tratamiento de Reproducción Asistida conlleva ciertas recomendaciones ya que puede ser un proceso lento, lleno de cuestiones e incógnitas y que puede afectar a la pareja.
Expertos en medicina reproductiva y psicólogos aconsejan que quienes vayan a iniciar un tratamiento sean pacientes, lo que puede ayudar a reducir los niveles de estrés y ansiedad.
1. Información al detalle
Es muy importante estar bien informados del tratamiento de reproducción asistida que se va a iniciar: en qué consiste, pruebas a realizar, tasa de éxito, riesgos y cuidados. Cuanta más información obtenida mayor seguridad dará a la paciente que comienza el tratamiento.
2. Comunicación: pareja y médico
Otro de los puntos claves es una buena comunicación. En primer lugar, con la pareja si existiera, a quienes es recomenable comunicar las dudas y preocupaciones que pueden ir surgiendo en el proceso. Y también con el médico, pues sabrá responder a las cuestiones que intranquilizan a la paciente ofreciéndole una mayor seguridad.
3. Apoyo
Es vital en un tratamiento de Reproducción Asistida. La mujer que inicia uno de estos tratamientos es recomendable que cuente con el apoyo de su pareja si la tiene, así como de familiares y amigos. También es aconsejable acercarse a personas que han pasado por lo mismo, con quienes se podrán intercambiar vivencias y puntos de vista.
4. La atención en varios focos
Los expertos recomiendan, asimismo, continuar con la vida habitual y distribuir la atención en varios focos para que el día a día no se centre exclusivamente en el embarazo. Esto ayudará a continuar con proyectos personales y profesionales, así como a reducir niveles de estrés y lograr un estado más relajado.
5. Disfruta
A pesar de la incertidumbre, los profesionales recomiendan disfrutar de todo el proceso de la Reproducción Asistida como punto de partida para lograr el sueño de ser padres.