En 2012 los embarazos de mujeres de más de 40 años triplicaron los del 2000.
La congelación de óvulos es un método al que recurren muchas mujeres para retrasar o prolongar su maternidad, ya sea porque quieren posponer esta decisión o porque desean tener más hijos en un futuro. De este modo, la calidad del óvulo no se ve afectada.
De las diversas técnicas de criopreservación de óvulos, la más usada es la vitrificación. Consiste en someter a los ovocitos a bajas temperaturas (-196 grados) mediante un enfriamiento rápido, evitando la formación de cristales de hielo en su interior. De esta manera, la supervivencia a la descongelación es superior que con otros métodos (97% en menores de 35). Las antiguas técnicas de criopreservación, por el contrario, se basaban en un congelamiento más lento y una descongelación rápida, lo que no garantizaba el porcentaje tan alto de mantenimiento de ovocitos.
Fuente del video: Procrear Clínica de Fertilidad
¿Por qué deciden muchas mujeres congelar sus óvulos?
Los motivos por los que una mujer decide congelar sus óvulos son muy diversos. A menudo cuando llega cierta edad una persona aún no ha tomado una decisión definitiva sobre la maternidad. Influyen factores personales y socio-económicos (falta de un trabajo o una pareja estable, necesidad de prolongar durante más tiempo otro proyecto de vida más independiente, el sentimiento de no hallarse preparadas, etc.). El temor es que, a mayor edad, la fertilidad disminuya. Efectivamente, a partir de los 35 años, la reserva ovárica suele ser menor. Con cada ciclo menstrual, una mujer pierde 1.000 óvulos.
Las razones que llevan a muchas mujeres a congelar sus óvulos, incluso si en un futuro deciden no usarlos, es preservar su fertilidad. En otras ocasiones, es una opción relativamente forzada. Por ejemplo, antes de un seguir un tratamiento médico. Es el caso de pacientes oncológicas cuando saben que el cáncer va a requerir quimioterapia y/o radioterapia. A menudo la fertilidad se verá afectada y prefieren preservar sus óvulos antes. O cuando se va a sufrir la extirpación de un ovario, endometriosis, etc.
También puede ser el caso de personas que por razones ideológicas y morales no quieren vitrificar embriones en la reproducción asistida pero el congelamiento de óvulos no les supone ese dilema ético.
En otros casos, las mujeres con baja reserva ovárica acuden a la fecundación in Vitro para aumentar las posibilidades de embarazo. Vitrifican los óvulos producidos por los ciclos de estimulación que están realizando.
Pensando en las receptoras, mujeres mayores de 40 años en muchos casos intentan quedarse embarazadas primero con sus propios gametos y, si no lo logran, acceden después a óvulos donados.
La congelación de óvulos está indicada para cualquier mujer mientras sea fértil. Eso sí, es preferible hacerlo antes de los 37 años. No obstante, como se realizan pruebas para comprobar la calidad de los óvulos, no depende tanto de la edad biológica de la mujer sino de su edad fértil.